Desde que se propuso hacer esta reunión de Parlanchines vengo dando vueltas a la idea del Speaker Corner en el Retiro. No es un pensamiento nuevo. No recuerdo, debe ser algo de la escuela, pero la semilla del speaker corner quedó sembrada hace mucho tiempo para después ser olvidada.
Sin embargo, no estaba muerta, solo esperaba el momento adecuado para salir. Como semilla tardía ahora crece con fuerza, sin prisas, pero con raíces profundas.
Las reuniones especiales de Parlanchines merecen una consideración diferente. Y ésta no es una excepción. Por un lado era especial por el sitio. Pero era doblemente especial por coincidir con la semana de San Isidro.
Sucedieron, como siempre, situaciones fuera de agenda. Pero todas genialmente gestionadas por los compañeros que más experiencia tienen, dejando además propuestas para sesiones venideras.
¿Es Parlanchines un Speaker Corner en el Retiro?
Para mí desde luego, el pasado miércoles, lo fue. El Teatro de Títeres es un marco impresionante. Yo lo recodaba más pequeño, pero entre las gradas de mucha capacidad y el pedazo de escenario con sus laterales, la verdad es que es un escenario y escaparate de lujo para el Ágora de Parlanchines.
Abriendo la sesión
De anfitrión tuvimos a un Javier soberbio. Gran presencia escénica. Mirad las fotos 😉
Como presentador ejerció Frank, al que tenemos que agradecer que cogiera el rol, casi sin tiempo, por la baja de Esther a principios de la semana.
Nos fue presentando uno por uno los roles de apoyo. Fran, nuevo socio debutando como contador de muletillas. Jose, cronometrador inapelable, amigo íntimo de Muletin. Y finalmente Jezabel, como evaluadora de escucha.
Discursos en el Ágora
Hace un par de semanas atrás, Santiago nos pidió que estuviéramos más activos con los discursos. A raíz de esto, me quedé pensando en cómo producir un discurso sencillo sin que lleváse mucho tiempo, y así poder aumentar la frecuencia de los mismos.
Mi mejor Día de San Isidro
Después de cabilar un poco, con la escusa de San Isidro, rememoré uno de esos días intensos en mi vida. Por la mañana en la Pradera de San Isidro con una chica, por la tarde conociendo nuevos amigos y la noche viendo un concierto de Queen, ¿o fue The Kinks? Un momento, ¿esto pasó en San Isidro?
No importa muchas veces qué sino cómo lo cuentas, y esto tiene mucho que ver en cómo lo has vivido. Todos tenemos, a lo largo de la vida, experiencia intensas, y esa intensidad nos ayudará a la hora de preparar un discurso potente.
Así que, la propuesta del cierre era sencilla:
- Haz tu lista TOP CINCO de experiencias vividas
- Escoge uno y prepara un discurso
- Compártelo en Parlanchines, cualquiera de las semanas que tenemos pocos discursos
Estoy preokupado
Santiago nos ha regalado un discurso soberbio. Nos habla de los okupas. Todo un tema, con profundas raíces en el mundo anglosajón. En España renace con fuerza en Madrid a partir del 15M y también con los lanzamientos de pisos ejecutados tras la burbuja.
Por una parte, esa bolsa enorme de pisos vaciados, en manos de la banca. De la otra, una cantidad de gente sin hogar desplazada por la crisis. Sólo era cuestión de tiempo que esto sucediera, los ingredientes estaban todos dados.
Discrepo con Santiago sobre las opiniones fundadas, porque creo que nos hace caer en una trampa al unir opiniones con fundadas. Pero es maravilloso como, en realidad, nos lleva, casi sin darnos cuenta, de lo que parece una opinión sobre los okupas y una experiencia personal, a una reflexión mucho más profunda sobre los derechos de los ciudadanos.
Además, como buen orador del speaker corner en el Retiro, tuvo un convencimiento profundo en su discurso. Y esto se notó —raro en Santiago— en su lenguaje corporal, en el uso de las manos, ¡gesto libre! diría Ángel Lafuente.
Propone, en vez de ampliar los derechos, a costa de perder libertades, un llamamiento a recuperar las libertades perdidas (y si no me equivoco, insinúa alguna todavía no ganada). Es decir, deme mis libertades, que ya me ganaré yo mis derechos. Simplemente genial.
deme mis libertades, que ya me ganaré yo mis derechos
Disfrutando los discursos improvisados
Los discursos improvisados están pensados como el momento en el que los invitados pueden participar más activamente, pero también los socios. Además, ojo al dato, hace poco aprendí —gracias Mónica— que en caso de ser llamados al escenario, los socios tenemos que participar.
Buena introducción de Frank, hablando de ¿que hago si me quedo en blanco? Hoy fue Elver el que dirigió la orquesta. Bajo su batuta estuvo César, hablando de taxistas y astronautas. Fran improvisó sobre sus cualidades ocultas de liderazgo. Jose se montó una película sobre el aprendizaje continuo y la vida. Javier nos habló de su amigo Platón, casi se le quedó pequeño el escenario. Nuestro invitado estrella, Ricardo, para cerrar la ronda, nos convenció que en realidad vivimos en un sueño, una ilusión. Gracias Elver ¡Reto Superado!
Tiempo de aprender, evaluaciones
Se echaron de menos las preguntas de hilo conductor, que siempre ayudan a hacer más suaves las transiciones entre discurso y discurso. Pero quizás por ello, esta vez el presentador tuvo un poco menos de relevancia, dando todo el protagonismo al resto de los participantes.
En realidad, este debe ser el gran aporte del presentador, de acuerdo a Agora Speakers, así en esta ocasión una ausencia, se convierte en virtud.
Estuvimos poco atentos, todos, a traer la utilería habitual para las reuniones. Así que no tuvimos hojas de evaluación. Muy rápidos, creo que Jose y Frank, propusieron una alternativa superadora.
Gracias al aporte de César, experto risonauta en situaciones adversas, con micrófono en mano, uno a uno fuimos dando nuestra evaluación tras los discursos. Muy interesante, nuevo discurs(it)o al canto, que además le dio un dinamismo extra a la reunión.
Evaluación veterana de los discursos
A cargo de Javier y de Jose, ambos nos regalaron evaluaciones, como corresponde, de socios veteranos. Descriptivos, generosos, enriquecedores, pero sobre todo, meticulosos con los puntos a mejorar. Jose además, cogió doble rol como evaluador de Santi ante el vacío en la agenda. Gracias Jose, gracias Javier.
Fran, contador de muletillas
Fran debutó con su programa de Ágora, en este rol. Tras pocas jornadas, se le nota una mejoría importante en el escenario, eliminando muchas muletillas de principiante. También su lenguaje corporal es más firme y su discurso más seguro. En la presentación del rol, además dio buenos ejemplos y lo explico muy correctamente.
Cayó en los errores típicos de iniciar su evaluación de forma directa, sin preámbulos. También en el hecho de que, tras la quinta muletilla, dejó, bueno él, de contarlas. Muletin se lo perdonará esta vez 🙂
Jose, cronometrador implacable
Jose, haga lo que haga, se lo toma muy en serio. Hoy no fue menos. Reloj en mano, nos dio nuestro tiempo, al segundo. Muy buena explicación del rol al principio también.
Cuando empecé en Parlanchines, Jose ya era un socio veterano, pero después de empezar con Parlanchines Aranjuez, ha metido un acelerón importante y su desempeño es cada día más notable ¡Que envidia la mia!
Jezabel, Emperatriz de la escucha
Jezabel tiene una presencia escénica y dominio del discurso sin apenas descosidos. Si acaso, algunas veces, en mi opinión, está demasiado seria. No fue el caso durante su speaker corner en el Retiro.
Desbordaba alegría, buen rollo y simpatía. El escenario la acompañaba. Buenas preguntas, precisas pero sin trampa y muy buena conducción del rol. En un tête à tête posterior confesaría que, salir a la calle, la hace feliz.
Asuntos del club, muchas novedades
Después de comentar con Santiago se propuso:
- el siguiente presentador, que hable durante los asuntos del club
- si no hay presentador, elegir uno
- no irse de la reunión sin al menos un discurso para la siguiente
- Después del éxito de las evaluaciones habladas posteriores a los discursos, estudiar maneras de incorporarlo en futuras reuniones, aunque sea ocasionalmente
- Se abrió una puerta a empezar a hacer debates, como ya están haciendo en Parlanchinglish.
Tercer tiempo (uno y dos)
Tener invitados es también parte de nuestra misión en Parlanchines. Quizás pinchamos al no conseguir convocar esta vez a ninguno nuevo, pero, el que repitió, Ricardo, se salió. Nos trajo un queso curado exquisito —que cortó finito— y dos buenos vinos, uno blanco y otro tinto, ecológicos y de producción propia. Peazo cierre de una sesión de lujo.
El segundo Tercer tiempo fue ya después, en una terracita de Ibiza, donde a Santiago, Ricardo y a mi mismo, nos cogió la madrugada.
4 respuestas
Sí, vale, la pregunta de la opinión fundada tenía su trampa, pero hay que recordar la importancia de la escucha activa. 😉
Jajaja. Está muy bien lo de hacer trampas. Por favor, no dejes de hacerlas. Creo que ahí es donde se nota los que más nivel tenéis. Gracias por comentar y por el aporte de la escucha activa.
Magnífica crónica de una fabulosa sesión. Muchísimas gracias Ángel. Tan didáctico y práctico.
¡Gracias a ti por comentar! A veces es dificil ser didáctico y la vez sufcientemente entretenido, pero como decía en la crónica, a veces es más importante cómo lo cuentas que lo que cuentas. De todas formas, la próxima intentaré ser un poco más sintético, ese es mi próximo ejercicio.